En el 2001 tenía 11 y no me olvido más ese diciembre. Mientras miraba por la tv el helicóptero, aunque no entendía nada, como todes, descubría que hasta las estructuras más estables, podían caer.
Durante el menemismo yo era una niña sin culpa de clase que amaba visitar a sus primos de CABA. con sus juguetes de USA, desayunando toblerones, trix y nesquik del que viene preparado, no el polvo. Tal vez de ahí viene el fetiche por los objetos, por los interiores abarrotados. Esa fantasía de esa casa llena de placeres pero percibiendo en el fondo un simulacro. Supongo que lo intuía cuando mi mamá pasó un par de semanas durmiendo en esa extraña una carpa blanca con sus amigas de la escuela.
cuando empecé a dibujar era muy fan de las novelas gráficas. me gustaba mucho copiar todas las texturas o trazos y tramas en cuadernos. como armarme un catálogo
Lo simbólico, lo sagrado. lo reprimido, la perseverancia, la ejecución,
la creación de un sistema de pensamiento coherente
Ante todo sentido del humor
sobre nosotres
sobre nuestras propias tragedias
y también sobre nuestras comedias
La irreductibilidad de los elemntos,
ese elemnto está ahi porque no puede haber otro
Su relación con los objetos en un contexto autoreferencial